España: La ganga de Europa

España, actualmente, se ha convertido en un país de oportunidades y donde los inversores extranjeros encuentran cosas a precios razonables. Esta llegando una cantidad considerable de dinero, estando cerca de 25.000 millones de euros los que han llegado a España como inversión extranjera directa, duplicando las cifras del año pasado. Nuestros principales "clientes" no son estrictamente personas en sí, sino los fondos de inversión internacionales. Estos fondos de inversión se enteran de las gangas que existen en España o bien mediante oficinas de representación o mediante apoderados (firmas que les asesoran).
Pero, ¿qué vienen buscando estos fondos de inversión a nuestro país? Éstos buscan propiedades inmobiliarias, carteras de crédito y participaciones en empresas que están muy endeudadas y al límite que no pueden mantenerse y se ven obligadas a vender o parte de su activo o sus participaciones de manera rápida y a precio de saldo.

Por otra parte, resulta un poco contradictorio que quieran invertir en el mercado inmobiliario tal y como está la situación y esto se debe a que el precio que se venden por parte de las entidades bancarias las propiedades inmobiliarias a los fondos de inversión es muy diferente que el que se le pone a un particular, existiendo una "rebaja" del 70% , es decir, estos fondos solo pagan un 30% de su valor real.
Pero esto no es todo, pues la mayor "ganga" la encontramos por parte de las carteras de crédito, es decir, préstamos que los bancos no pueden cobrar, este los agrupa y los revende a un tercero para que gestione ese cobro. Se están revendiendo aproximadamente al 3% del valor nominal inicial. Por ejemplo, un préstamo de 10.000€ se puede estar vendiendo perfectamente por 300€.
Estos fondos de inversión no solo intentan cobrar el 100% de lo que vale en realidad, sino que esa cifra aumenta con los intereses y los costes del proceso judicial que llevan a cabo. Estos fondos de inversión son, por ejemplo, PROMONTORIA O CERBERUS.
El problema de esto es que en muchas ocasiones los bancos realizan dichas operaciones sin consultar con sus clientes y pudiéndoles así perjudicar a la hora de sacar su dinero y que descubran que el fondo de inversión es ahora el propietario de esa deuda. Si el ciudadano se entera de esto, puede retractarse, como así reconoce el Código Civil. Esto consiste en que en los primeros 9 días desde que el fondo le comunica que ha adquirido esa deuda, puede ejercer ese derecho y recomprar así su deuda y cancelarla por el mismo importe que ha pagado el fondo a ese 3% que comentábamos antes, sin embargo, este es un proceso complejo.
Sin embargo, y pese a lo dicho anteriormente, los fondos de inversión son una buena noticia, pues mejoran la situación económica del país, su financiación internacional, baja la prima de riesgo... pero es cierto que no ayuda a factores como la disminución del paro, pues son inversiones estrictamente financieras o también llamadas especulativas, pero pueden considerarse un primer paso.
Vamos a poner ahora ejemplos de como un fondo de inversión ha podido ayudarnos:

FAMOSA era una empresa familiar. Entró SUN CAPITAL pagando solo 1€ ya que en ese momento la empresa estaba a punto de la quiebra y tenía una deuda muy grande con los bancos, que ante la posibilidad de  no cobrar nada de la deuda, le perdonan la mitad de esta, que es lo que se conoce como la "quita". Gracias a esto solo 450 personas de 4450 perdieron sus puestos de trabajo, pero esto no se detiene aquí. Hicieron una estrategia de un odelo de negocio invirtiendo en mercados exteriores, en innovación, metiendose en mercados como China y México, y hoy FAMOSA tiene el 51% de sus ventas en mercados exteriores. Gracias a esta operación, lo que el fondo compró por 1€ puede venderlo ahora por un valor de 150 millones de euros.
De esto podemos sacar de conclusión que, generalmente, los fondos de inversión pueden ayudarnos a nosotros y resultar rentables para los inversores, pero no podemos olvidar que, como dijimos antes, esto es un primer paso, pero debe transformarse en una inversión productiva ya que, de igual forma que llegan, pueden irse.